«No podemos resolver la crisis climática sin cambiar nuestra relación con la naturaleza y con nosotros mismos.»

Naomi Klein.

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La Lenta Democracia

Pablo Palma Soza

Psicólogo Magíster en Psicología Social Docente Facultad de Ciencias Sociales y Humanidades Universidad Autónoma de Chile Sede Talca

Actualmente una de las principales discusiones es como debe funcionar la democracia, atribuyéndole en muchos casos los problemas globales a ésta, pues se piensa si se ha avanzado tanto en democracia ¿Por qué siguen los mismos problemas?, mas allá de esta legitima pregunta es analizar los cuestionamientos a las democracias actuales y como mejorarlas.

Una de las principales dificultades actuales es que los problemas parecen ser muchos y muy rápidos y la democracia parece ser lenta y demorosa, lo que lleva a muchos a plantear alternativas de decisión  no democráticas o ilegitimas con la excusa de la solución rápida de los problemas, lo que abre la oportunidad al surgimiento de autoritarismos surgidos de forma democrática pero que rápidamente se desenmarcan de la institucionalidad para poder mantener el poder. En este escenario hay que preguntarse ¿es lenta la democracia? Si es así ¿debiera ser más rápida?, ¿afectará la velocidad la participación y legitimidad? Estas son preguntas propias de nuestra era pues parece que la democracia funciona a una velocidad de antaño, que deberíamos transitar a una democracia digital o nuevas formas de democracia, ningún problema ahí, el peligro es cuando estamos tan apurados en tomar decisiones que éstas dejan de ser vinculantes y son puramente tecnocracia, el peligro de decir  “ como no hay tiempo que un experto o designado decida”, si bien esta alternativa es válida para un sinfín de problemas del día a día no puede solucionar los problemas políticos más profundos en los cuales la discusión de ideas , la negociación y la deliberación con estándares de democracia madura son necesarios. Es grande  la tentación de caer en proceso no democráticos pero si muy rápidos para solucionar nuestros problemas como sociedad.

Esto no parece ser casual en cuanto a la Infocracia, que es el control no democrático de forma psicopolítica a partir de las noticias falsas como control de la sociedad y dirección de la opinión pública (Han,2022) este control a partir de los medios digitales y el exceso de información permite que las noticas falsas que siempre han existido se difundan a una velocidad incontrolable y que se aprovechen de nuestras limitaciones cognitivas y sociales para procesar la información y corroborar la fuente. Este nuevo movimiento no solo ha cambiado el transcurso de procesos eleccionarios en el mundo sino que también instala ideas que van en contra de la democracia, entre ellas apela a su lentitud para llegar a consensos  también poniendo en duda la legitimidad de los mismos procesos democráticos.

Es en este contexto de una sociedad altamente acelerada e hiper instrumental y materialista que la democracia parece perder espacios dado la necesidad de tiempo, participación y acuerdos , dando paso a soluciones autoritarias, rápidas y poco legitimas que son muy peligrosas para nuestra convivencia.

Se hace necesario no apurar la democracia sino que enlentecerla lo más posible y generar los espacios necesarios para las discusiones que sean necesarias, demore lo que demoren estos procesos, también es importante poner atención a las noticias falsas y su proliferación que nos pueden llevar a distorsiones tan grandes que podrían destruir procesos deliberativos de largo aliento.

Bibliografía

Han, B. C. (2022). Infocracia. Editorial Taurus.

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