
Líquenes y amantes de los líquenes. Holobiontes en todas partes [*]
En la foto, Irene, una joven bióloga de la Abbadia San Salvatore, abraza una haya que crece en la ladera de la montaña Amiata, en Toscana, Italia. Observe los líquenes blancos que crecen en la superficie. Además de amante de los árboles, Irene también lo es de los líquenes. Y un holobionte también. |
«La vida no se apoderó del mundo mediante el combate, sino mediante la creación de redes» — Lynn Margulis, 1996
No es tan fácil encontrar compañeros amantes de los líquenes. Los líquenes son tan comunes y, sin embargo, tan incomprendidos e ignorados, a pesar de ser el ejemplo por excelencia de un holobionte. Son criaturas formadas por dos especies completamente diferentes, un hongo y un alga (o una cianobacteria, no es lo mismo que un alga, pero funciona de manera similar). Las algas y las cianobacterias son organismos fotosintéticos que proporcionan alimento al hongo. El hongo, a su vez, extrae nutrientes minerales del sustrato y los proporciona a las algas/cianobacterias. Un ejemplo perfecto de simbiosis, los líquenes han existido durante cientos de millones de años, posiblemente miles de millones de años, y probablemente fueron los primeros organismos que colonizaron la tierra en tiempos muy antiguos.
Una vez que descubres los líquenes, no puedes evitar quedar fascinado por su increíble variedad de formas y colores. Pueden tener ramas diminutas y sin hojas (frutícolas), estructuras planas en forma de hojas (foliosas); pueden formar una costra que se adhiere al sustrato (crustosa), tener apariencia de polvo (leprosa); y más. Te dan algunas ideas de las condiciones de salud generales del bioma en el que aparecen, especialmente si aparecen en estado folioso. Algunos de ellos son comestibles y han sido apreciados como alimento por muchas culturas tradicionales y también por los renos. A continuación, en la foto izquierda, una impresión muestra a coleccionistas de líquenes japoneses.

En nuestra cultura, los amantes de los líquenes son un poco raros, pero existen, y cuando se encuentran pueden participar en apreciaciones líricas de los líquenes que observan, como hice yo cuando conocí a Irene, en los bosques de las montañas de Amiata. Hay un sitio en Facebook sobre líquenes (lamentablemente no se ha actualizado durante los últimos tres años), una «società lichenologica italiana» activa, una «Sociedad Británica de Liquen«, y seguramente podrá encontrar muchos más sitios sobre el tema buscando en la Web. Pero el mero hecho de ver a estas pequeñas criaturas tal como son es una fuente de asombro sin fin. No necesita estar en la naturaleza extraurbana. Puede encontrar muchos líquenes en cualquier lugar de las zonas urbanizadas. Aquí hay algunos líquenes blancos que crecen en la tumba casi olvidada de Vernon Lee (1856-1935), escritor y poeta británico que vivió la mayor parte de su vida en la Toscana. La poesía es una forma de holobionte virtual que crece en la mente.

h/t Irene Mazza, Cinzia Mammolotti y Miguel Martínez
Holobiontes: un nuevo paradigma para comprender el papel de la humanidad en el ecosistema
Tú eres un holobionte, yo soy un holobionte, todos somos holobiontes. «Holobionte» significa, literalmente, «criatura viviente completa».
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Fuente: 26.08.2023, desde el blog de Ugo Bardi “The Proud Holobionts” (“Los
Orgullosos Holobiontes”), autorizado por el autor
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