Los Humedales Urbanos de Punta Arenas [*]
Punta Arenas posee miles de historias desde antes que estuviéramos nosotros como especie en esta tierra o le pusiéramos un nombre, esas antiguas e inimaginables historias no se pueden describir pues no tenemos certezas de lo ocurrido pero si evidencias que nos muestran que el mar llegó a lugares increíbles y que la mega fauna deambulaba por nuestros bosques y estepas a sus anchas.
Cuando los pueblos originarios formaron parte de este entorno, la flora y la fauna ya estaba presente y las evidencias señalan que comenzaron a utilizar de alimento las grandes poblaciones que existían en los diversos ecosistemas de la región. Es sorprendente el número de gansos, de guanacos, de ñandúes, de patos y claramente de bosques que cubrían esta tierra.
La llegada de la civilización marcó el comienzo de un camino que nos llevó a un progreso en detrimento de aquello que nos proporcionaba la vida, quizá la ignorancia o más bien la codicia puntual terminó por destruir grandes extensiones de bosques, los indígenas fueron desplazados y despreciados, inclusive por mismísimo padre de la teoría de la evolución y, por consiguiente, comenzó la inevitable intervención de los ecosistemas que por años fueron parte del paisaje; los terrenos para la ganadería fueron quizá los más extensos y comenzaron a crecer las ciudades, como Punta Arenas.
La ciudad comenzó a progresar y como es costumbre la lógica civilizada no consideró nunca el componente ambiental para concretar este desarrollo, las antiguas lagunas y los humedales fueron rellenados con material estabilizado para construir sobre ellos. En la actualidad los antiguos magallánicos relatan cómo las actuales inundaciones ocurren justamente en aquellas antiguas lagunas que no eran más que humedales urbanos.
Hoy en día definimos estos espacios esbozando conceptos y clasificaciones, su categoría es de “humedales urbanos”, nos referimos a espacios húmedos en donde existe una importante presencia de vida, las más atractivas por su tamaño y aquella despreciada como la microscópica, como la entomológica. El principal conflicto que se destaca es que si apenas conocemos la realidad de la macro-fauna, de los gansos, taguas y patos, entonces ¿cómo podríamos valorar los más pequeños? Este es un importante conflicto actual cuando apenas valoramos lo que podemos ver pero no observar.
Pero no todo está perdido, ahora podemos clasificar las diferentes superficies con las que se topa una ciudad en desarrollo, como un humedal urbano, aunque no sin antes validar una serie de requisitos que debe cumplir dichas áreas. Al final de cuentas la ley es insuficiente pero es una herramienta importante que, una vez más, requiere de organizaciones sociales para relevar su importancia; por supuesto esto no debería ser así, pero nunca fue diferente pues fueron las organizaciones sociales ambientales las que lucharon por esta primera definición y protección.
Punta Arenas aún posee territorio por descubrir, ¿pero cómo, si solo son terrenos llenos de basura, comentan?, pues no, muchos sectores forman parte de una red biótica que conecta escasos espacios que ocupan muchas especies de aves, en sus desplazamientos anuales y migratorios. Las condiciones climáticas marcan en gran medida su presencia o ausencia enseñándonos que estamos cambiando con evidencias que flotan en el limbo del conocimiento y que nadie aún es capaz de compilar.
Los humedales urbanos, las pequeñas lagunas y sitios húmedos que guardan como un cofre de tesoros que esperan ser descubiertos o mueren bajo el cemento como aquellas que aún hoy día siguen en peligro.
Los ‘humedales urbanos’ de Punta arenas se pueden graficar en el siguiente esquema, (preliminar); en él se pueden observar los primeros que en su mayoría son visitados por diferentes especies que ocupan estas superficies para perpetuar la vida y de paso mantener la nuestra, aunque no seamos capaces de comprender esta realidad.
En cuanto a su importancia, desde el punto de vista de la fauna aviar, el día 1 del mes de agosto realicé un recorrido utilizando un solo punto de observación en cada lugar; los resultados son evidentes: el mayor número de individuos se observó en el Humedal Tres Puentes, el segundo lugar de importancia fue el Turbal y en último lugar se ubica el Parque María Behety, solo considerando las aves observadas en el sector.
Es importante destacar que aún se encuentra pendiente el nombramiento del Humedal Tres Puentes como Humedal Urbano, siendo el más importante de todos los evaluados (falta en la lista el Humedal Haedicke). Los demás deben ser propuestos una vez que se recabe el máximo de información requerida.
Los humedales urbanos de Punta Arenas comienzan a enseñarnos sus beneficios y las evidencias de un tiempo pasado que no volverá, pero que se resiste a desaparecer como los pequeños espacios que subsisten y se conectan entre sí, espacios que sin duda son necesarios de proteger, si queremos aprender y encontrar soluciones reales para su preservación.
Los humedales de Punta Arenas aún existen y esperan por protección.
HGG
12.10.2021
Fuente: [*]
Muchas gracias por el artículo tan necesario para difundir el valor de los humedales y eliminar esa nefasta práctica de verlos como tierra no productiva. Por el contrario la necesidad de realzar sus grandes aportes ecosistémicos y paisajísticos. Una estrategia es incorporarlos a la Infraestructura Verde de la ciudad destacando los servicios ecosistémicos que provee.