MURO Y MURALISMO. David Alfaro SIQUEIROS Y Jorge GONZALEZ CAMARENA en la Región del Bío-Bío
David Alfaro Siqueiros y Jorge González Camarena son dos artistas que componen
el movimiento muralista de México. De ambos tenemos obras en Chile: Siqueiros en la Escuela México de Chillán (años cuarenta) y González Camarena en la Pinacoteca de la Universidad de Concepción.
El muralismo Mexicano es internacionalmente conocido entre los muralistas más destacados se encuentran Diego Ribera, José Clemente Orozco, D.A. Siqueiros y otros; fue un movimiento que se involucró con las corrientes del arte moderno de París, a comienzos del siglo XX, y con la política de izquierda, muy popular entre los artistas de esa época. Además, adoptó componentes propios de la cultura americana; de esta combinación de códigos surgió el muralismo, el cual nos llegó a Chile por medio de dos artistas: David Alfaro Siqueiros y Jorge González Camarena, como también por algunos chilenos que colaboraron con estos mexicanos para realizar estas obras.
D.A. Siqueiros llegó a Chile, gracias a las diligencias realizadas por Pablo Neruda, el cual consiguió que este artista cambiara su pena de presidio, la que tuvo su origen por su participación en el asesinato de León Trotsky, por el exilio en Chile, especialmente en Chillán, donde debía pintar un mural en la Biblioteca de la Escuela México. Siqueiros se estableció en Chillán para cumplir con sus compromisos y realizó un mural que lleva por título “Muerte al invasor”; para ello, el artista forró los muros en masonite y placas terciadas en el cielo raso, pintó sobre todas ellas, utilizando pintura industrial, ducos y esmaltes, una técnica que él desarrolló para ejecutar las obras con menos tiempo, dado que el secado de estas pinturas es más rápido que la tradicionales.
Técnicamente un mural corresponde a una obra realizada, en la cual el muro es el soporte
de la pintura; de acuerdo con ello, la obra de Siqueiros no es un mural, aunque tiene formato de mural, pero está pintada sobre madera aglomerada, la masonite es un tipo de cholguán grueso de importación, el cual fue dispuesto sobre un esqueleto de madera sobre los muros de albañilería de la Biblioteca de la Escuela México; de acuerdo con ello, técnicamente no corresponde a un mural aunque tenga su formato. No es el caso de González Camarena que utilizó el muro sur de la Pinacoteca, muro que preparó con una fina capa texturizada, con el fin de evitar reflejos y sobre ella pintó con pigmentos en una solución de acrilatos.
Los temas tratados en los dos murales son atingentes a la historia de América Latina e involucran a Chile y México. Lamentablemente estas dos obras son desconocidas para la mayoría de los chilenos, especialmente aquellos dedicados a las artes visuales. La obra de Siqueiros fue restaurada hace algún tiempo; para ello vinieron especialistas desde México. Este trabajo asegurará que esta obra viva unos cuantos años más y forme una parte importante de nuestro patrimonio nacional. Por suerte, la obra de González Camarena, realizada en los años sesenta, no sufrió daños con el último terremoto, salvo algunas grietas menores. La estructura se mantuvo bastante bien, su iconografía es rica en componentes, en la cual predominan aspectos de composición surrealista: ello en términos de cómo se enlazan y relacionan las figuras. El mejor ejemplo se encuentra en el cuerpo femenino, sobre el cual se encuentra el mapa de América Latina, como también en el enlace de la arquitectura prehispánica de piedra con lo hispano occidental, representado por un capitel jónico de estilo greco- romano. A esto se suma la idea de una fusión de culturas lo que es representado por la pareja primordial, representada en este caso por una hermosa nativa desnuda y de pie – al lado – un soldado con coraza. Sobre la iconografía se recomienda observar los aspectos simbólicos que el autor consignó en esta obra, por ejemplo, el nopal con copihues, todos ellos atravesados por puñales, son símbolos botánicos y de la invasión por las armas. Se agrega la pirámide maquinista, en donde operan nativos y tecnología industrial; es interesante observar que el artista no sólo intervino el muro, sino también integró la baranda de la escala que conduce al segundo piso de la Pinacoteca. Esta integración la realizó, representando en ese lugar asuntos geométricos que conducen la mirada del espectador al ascenso arquitectural. El nombre asignado a esta monumental obra es: ”Presencia de América Latina”. Camarena constituyó un equipo de ayudantes para realizar esta obra: los artistas mexicanos Juan Manuel Guillén, Salvador Almaraz y Javier Arévalo y los artistas chilenos Albino Echeverría y Eugenio Brito.
Ante la narrativa pasiva de las figuras de González Camarena, se oponen las figuras de gran fuerza expresiva de Siqueiros, herencia del expresionismo europeo que le sirvió para expresar su posición en torno a la historia de Chile en el muro sur, y de México en el muro norte. En el cielo raso pintó una espada con forma de cruz cristiana que atraviesa todo el salón de la Biblioteca. En resumen, la fuerza cromática y el dinamismo en las figuras constituyen el grito que es el título de esta obra:”Muerte al invasor”. Octavio Paz escribió: “ el mundo de Siqueiros es el de los contrastes: materia y espíritu, afirmación y negación de movimiento e inamovilidad, sus figuras parecen que quieren escapar del cuadro, dejar de ser pintura y convertirse en símbolo puro”.
Saludo la publicaciones de arte en esta ventana que nos abre la vista a lo bello.
Saludos al autor
Una clase de Muralismo y muralistas que nos trajeron arte pictórico a chile, en tiempos en que la cultura tenía un amplio espacio en nuestro País.