5 de junio: Día Mundial del Medioambiente
Miles de años de evolución nos demuestran que la sociedad humana a lo largo de su historia se ha relacionado estrechamente con el medio que lo rodea, modificando sus conductas para el mejor aprovechamiento de los recursos que el entorno le proporciona, esta relación humanidad-medio, se ha caracterizado por la utilización exacerbada de recursos naturales, llevando al planeta al límite de lo posible y a la inteligencia humana a crear nuevas formas para producir alimentos, mediante alteraciones genéticas de plantas y animales, a la transformación de desiertos en zonas de cultivo mediante el riego, situación que ha agotado los cursos de agua y napas freáticas en distintos países del mundo.
Desde la Revolución Industrial y el aumento permanente de la población mundial, las necesidades han incentivado el aumento progresivo de la extracción recursos naturales para satisfacer las necesidades humanas. Así, en el último siglo, el aumento de contaminación derivado de los sistemas productivos ha producido daños irreversibles en el ambiente, acelerando el efecto invernadero, aumentando el tamaño del agujero de la capa de ozono, aumentando la desertificación de distintas zonas del planeta, agotando los recursos naturales no renovables, siendo estos, sólo algunos temas que muestran la gravedad de la sobrepoblación humana y los medios de producción industrial que generan gran cantidad de contaminantes que son liberados al aire, agua y suelo.
Estos problemas medioambientales son consecuencia de hechos concretos y de economías centradas solo en la producción de riqueza, sin tener conciencia del daño ecológico que producen en la generación de productos para comercializarlos en el mercado. Ellos, promovidos por los hábitos consumistas de la misma sociedad que ha priorizado los productos desechables, lo que a su vez genera mayor cantidad de basura, sumando a ello, la contaminación que los diversos procesos industriales generan para producir los bienes demandados por la sociedad. Un punto importante para reducir la contaminación podría ser generar una conciencia sobre el daño ecológico que generan nuestros “caprichos” de productos no esenciales, en este caso, se debe considerar la educación ambiental como una ayuda para reducir la contaminación. A pesar que pueda parecer minúsculo nuestro aporte individual, debemos tener presente que en conjunto, como sociedad, podríamos reducir los desperdicios en varios miles de toneladas.
Con el propósito de generar conciencia medioambiental a nivel mundial, desde el 5 de junio de 1974, se ha celebrado el día del medioambiente, a pesar que la Asamblea General de Naciones Unidas (ONU), lo estableciera el 15 de diciembre de 1972. De este modo, la conferencia de Estocolmo en 1972 fue la primera en centrar el tema medioambiental en la discusión internacional, de cómo la actividad industrial ha dañado el medioambiente y la imperiosa necesidad de reducir las emisiones de contaminantes debido a la espiral en el deterioro ecológico a nivel mundial. Posterior a esa, se han organizado diversas cumbres con el fin de promover en los países miembros conciencia medioambiental, promoviendo acuerdos internacionales entre los países participantes para la reducción de emisiones de contaminación.
Entre las principales cumbres y protocolos internacionales en pos de la protección del medioambiente, podemos considerar:
- Estocolmo 1972
- Nairobi 1982
- Río de Janeiro 1992
- Johannesburgo 2002
- Cumbre Río+20 (Río de Janeiro 2012).
De las antes mencionadas, es preciso destacar la Cumbre de Río de Janeiro en 1992, ya que fue la primera que logró acuerdos reales entre los países participantes para reducir las emisiones contaminantes y así disminuir el acelerado proceso de cambio climático global a causa de los gases de efecto invernadero y otros contaminantes que dañan los distintos ecosistemas.
Para finalizar, la designación del 5 de junio como día internacional del medio ambiente es un hecho importante para concientizar a las personas sobre el daño ecológico que producimos día a día a nuestro planeta. Debemos tener presente la importancia de las cumbres ambientales que se han realizado y los acuerdos que los estados participantes han determinado con el propósito de reducir las emisiones contaminantes. La Cumbre de Río de Janeiro de 1992 puede ser considerada, por lo dicho; las realizadas con anterioridad no lograron los objetivos que se habían propuesto.
Las cumbres de la Tierra, se siguen realizando con el fin de que los países participantes lleguen a acuerdos con el propósito de reducir sus emisiones contaminantes y generar una conciencia medioambiental para que las nuevas generaciones no reciban un planeta destruido. He ahí la importancia de realizar la defensa de los ecosistemas planetarios y de mitigar los impactos negativos que provocamos día a día. Además, consideramos a la educación ambiental el factor fundamental al momento de crear conciencia ecológica en la ciudadanía, generando personas más informadas, más críticas, más responsables, es decir, una cultura de cuidado y protección medioambiental. No obstante, una legislación ambiental también es importante, pero ello no necesariamente lleva a concientizar a las personas, para esto hay que intervenir en la educación de los niños mediante modificaciones curriculares en los planes de estudio en todos los niveles de la educación.
Me sumo a la pregunta planteada por Felipe, ¿es factible un cambio a través de la educación? Personalmente creo que si se podría, pero hay que intervenir el curriculum nacional para ello. Como en todo ámbito de nuestra sociedad, los contenidos que se deben abordar en clases apuntan a la cantidad de materia y no a la calidad del aprendizaje. Tenemos muchas horas de aula pero poco cambio real, los estudiantes siguen odiando leer y cada vez hablan peor, las generaciones son cada vez mas ignorantes y eso que se han aumentado las horas lectivas en todas las asignaturas. Desde mi punto de vista, un poco radical, debiésemos hacer un estudio profundo de lo que queremos que nuestros niños sepan y de la calidad de seres humanos que deseamos que ellos lleguen a ser, dando énfasis al aprendizaje de contenidos que se ajusten a las necesidades de nuestro mundo actual y al legado que queremos dejar en el planeta desde los valores sociales, familiares, conciencia medioambiental, cuidado personal y del entorno, por nombrar algunos.
Nuevamente felicitar al autor, Nelson, no manejaba los datos que aquí entrega sobre las distintas cumbres y me pareció muy interesante saber que se han hecho esfuerzos mundiales para poder mitigar el efecto nocivo que hemos tenido sobre nuestro planeta, sería interesante que Chile fuese anfitrión de alguna cumbre tan importante como la de Río
Macarena, como señalas y como respondí a Felipe, si es posible un a educación ambiental, solo que las modificaciones las debe realizar el Ministerio de Educación mediante adecuaciones curriculares en todos los niveles y asignaturas, no hacerlo en un capitulo de unidad en algunas asignaturas, que por lo general son las de ciencias e historia.
Saludos
La educación ambiental en el colegio es fundamental es algo fundamental como señalas macarena y se ha sostenido en el mismo artículo.
Además, considero que sería relevante la creación de programas culturales-ambientales en la televisión de señal abierta, con programas entretenidos para los niños, con el fin de educar ambientalmente y en otros temas culturales de forma entretenida.
Las cumbres de la tierra que mencionas, al igual que los protocolos, como por ejemplo el de Kioto, son fundamentales para generar una conciencia en los lideres mundiales sobre la necesidad de cuidar el medioambiente.
La cumbre de Río de Janeiro de 1992, fue y hasta el momento es la más importante, ya que en ella se consiguieron mayores avances en protección ecológica del planeta.
Pero, en relación a lo que concluyes sobre la importancia de la educación, ¿crees que es posible crear y aplicar una educación ambiental en los colegios de Chile?
Felipe, así es, lo protocolos, al igual que las cumbres de la tierra son espacios en los que los lideres mundiales llegan a acuerdos medioambientales con el fin de reducir las emociones de contaminantes.
En cuanto a la pregunta que formulas, creo que sí es posible una educación ambiental, considerando que, en el caso de historia y geografía, hay capítulos de unidades que hablan sobre el impacto que la humanidad ha provocado al planeta y también se estudia las posibles soluciones ligadas a: reciclar, reducir y reutilizar. No obstante, considero una educación ambiental más integral, no solo abordar el problema en un capitulo de unidad. Para que exista una verdadera educación ambiental en Chile, el Ministerio de Educación debe generar los planes y programas respectivos, y considero que los gobiernos de turno no han actuado inconscientemente respecto al tema medioambiental.
Saludos
En ese caso tienes razón, si el ministerio de educación modifica los planes de estudio se podría tener una educación ambiental.
Ahora, el problema radica en que debemos esperar que la lenta burocracia nacional realice dichas adecuaciones a los planes de estudio.
Esperemos que en algún momento de la vida los políticos legislen algo relacionado al tema y que se pongan firmes en relación al tema medioambiental.
Así es Felipe, solo debemos esperar, aun que, la sociedad también puede generar demandas para que el gobierno tome las medidas pertinentes y acelerar dicho proceso.
Saludos