
EL DIA “D”
Hace más de 73 años, los aliados de entonces luchaban en contra de la irracionalidad de un sujeto y sus seguidores y que pretendía imponer una tiranía en función de una supuesta superioridad racial y cultural. El mundo estuvo en una real encrucijada pero salió triunfante, aunque herido, de tamaño holocausto. Este triunfo final en contra de las fuerzas del mal, se debió, fundamentalmente a la unidad de los pueblos que luchaban por su libertad y por su autodeterminación, incluso con distintas ideologías pero con el mismo espíritu de supervivencia. También la liberación de aquellos pueblos se debió, a la claridad, aunque con matices, de sus líderes, pero claridad al fin para avanzar con el reloj de la historia, que se había detenido al comenzar la Segunda Guerra Mundial.
En el presente Chile se encuentra frente a una encrucijada, debe enfrentar a fuerzas retardatarias, y que haciendo campaña del terror por doquier con su candidato, ha pretendido desconocer lo que con dificultades se ha podido realizar en materia de beneficios para los sectores más desposeídos y donde la Presidenta Bachelet ha puesto énfasis en que las reformas realizadas y por realizar se hará posible en la medida que triunfe el candidato de las fuerzas progresistas. Existe concordancia en los dos candidatos, candidato y candidata, del progresismo en continuar y profundizar las reformas realizadas hasta el momento y otras necesarias para traer más prosperidad y confianza a nuestros connacionales. Las AFP. Las ISAPRES (un tanto olvidadas) son bastiones de la reacción que habrá que derribar, es uno de los anhelos más apreciados de este pueblo que mayoritariamente votó en contra de Piñera. Hay más de un 56% de votantes que lo hicieron en contra de aquel. Las fuerzas progresistas de este país tienen más de 650.000 votos más que la ultra derecha y la derecha. También hay que reconocer que una nueva fuerza política nace a la luz de los acontecimientos que viene a renovar los aires para ir dejando de lado una vieja, desgastada y desprestigiada clase política, aunque todavía sobreviven algunos viejos carcamales de todos los pelajes. El Frente Amplio surge con 20 diputados y un senador, sin lugar va a ser un actor fundamental en este proceso. A nuestro juicio, debe actuar con mesura y sin soberbia, sin transar sus principios programáticos pero tomando en cuenta que el reloj de la historia no se puede detener ni volver al pasado.
La Democracia Cristiana a través de su candidata presidencial: seria, valiente y responsable, sin lugar a dudas, demostró, sin embargo que el camino propio no le es favorable. La soledad llevó al PDC a perder no pocos parlamentarios, aunque no así votos. Conservo la votación que obtuvo en las elecciones municipales pasadas. En todo caso, la decisión de la Cúpula Partidaria de apoyar al candidato de la nueva mayoría por unanimidad significa una vuelta al redil, al respecto tenemos el convencimiento que una abrumadora mayoría de los demócratas cristianos y simpatizantes apoyará y hará del candidato progresista un presidente responsable, honrado y transparente. En todo caso para los lectores con memoria histórica, la DC nunca ha votado por un candidato de derecha y ésta no será la ocasión de hacerlo. Por otra parte, no toda la DC, ni mucho menos, comparte ese anticomunismo de algunos elementos cupulares. El Partido Comunista Chileno ha participado y trabajado lealmente tanto en los gobiernos de la concertación y sus votos han servido para elegir a presidentes y presidenta de nuestro país. Tampoco compartimos el mote de “centrista” que se le atribuye a la DC. Y que también algunos al interior comparten. Somos un partido progresista en toda su dimensión. Que el centrismo y los centristas se traguen su ambigüedad doctrinaria, conceptual y también su oportunismo.
El próximo día 17 de diciembre será el “DÍA D” para todos los chilenos progresistas que quieran perfeccionar y profundizar las reformas realizadas por la Presidenta Michelle Bachelet. La unidad de las fuerzas progresistas será fundamental para derrotar el obscurantismo y la campaña del terror desplegada por Piñera y compañía.
Es necesario abandonar los eufemismos. No hay centro-derecha, existe una derecha y una ultraderecha, son aquellos a los que hay que derrotar el 17 de diciembre. No hay vuelta atrás, es necesario hacer avanzar el reloj de la historia.
A vencer el terrorismo, la ambigüedad y el retroceso. Para finalizar nuestras palabras, quisiera terminar mencionando dos sentencias para la meditación: No quisiera ser castigado por el bíblico anatema “hay de mi porque he callado” y las sabias palabras de Radomiro Tomic que resuenan en nuestros oídos. “Cuando se gana con la Derecha, es la Derecha quién gana”.
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