
El drama de la complejidad democrática
Siguiendo a Pierre Rosanvallon, queda claro que la historia de la democracia ha sido tumultuosa y en un andamiaje de avances y retrocesos, a veces severos. Europa fue su cuna, y su evo e involución autoritaria. Sentencia preclara para nosotros chilenos de la segunda mitad del siglo XX y que nos toca nuevamente en cuerpo y alma de manera tormentosa.
Cabe reiterar, que la democracia siempre ha sido frágil y siempre el objeto de un combate de consolidación y muchas veces de trincheras y desconcierto. Para comprenderla las ciencias sociales son una parte importante, dada su potencialidad de visión sistémica y múltiple, a veces creciente, sinuosa y re-emergente.
Todos aquí y allá, somos aprendices de la democracia, los europeos, los norteamericanos y nosotros los latinos americanos y en cada lugar, porque no hay profesores de democracia; ella, se experimenta y no se enseña sólo en manuales y escritos. Es menester convivir con ella, descubrirla en sus crisis y contar con ejemplos confiables.
En este marco, P. Rosanvallon distingue cuatro grandes tendencias de cambio en el proceso de la democracia contemporánea, útil de tener en consideración para procesar nuestra vivencia actual:
La primera trata de la tendencia a la pluralización, vista en el hecho que la gran mayoría es rara; una votación excepcional representa hoy un 55.00%. En efecto, hay clara dispersión. Así, una ficción democrática se basa en la idea de que una mayoría puede representar adecuadamente a la totalidad del país.
La segunda, habla de multiplicar el modo de representación de la sociedad como forma de encarnar la voluntad del poder general. En esta dirección se cuestiona el concepto de pueblo por su ambigüedad; pues hay un pueblo aritmético, que es el que vota y se abstiene cada vez más; y otro, el pueblo social, aquel de agrupaciones diversas o forma de movimiento o comunidad de intereses frente a una o más demandas; junto, a otras agrupaciones de grandes principios del derecho, por la defensa del individuo y por el reconocimiento del ciudadano.
La tercera tendencia se refiere a la transformación del sujeto de la política, que se enmarca en la teoría de la sociedad de semejantes de Tocqueville. Es la puesta en escena de la singularidad o la búsqueda de un ser único valorizado; donde gobernar ahora, exige acto de presencia real y no sólo gestión gerencial. Se trata de la sociedad definida como una narración o síntesis frente a miedos, experiencias y de expectativas de interés general.
La puesta en cuestión hoy, corresponde al punto de quiebre entre el distanciamiento entre la democracia como forma política y la otra como forma social. Propia de sociedades disgregadas internamente, como nuestro caso. Representa las desigualdades sociales crecientes en el mundo y en Chile, y nos interroga respecto hacia dónde vamos y presiona por respuestas acertadas, empáticas, ecológicas y democráticas. Se trata de la profundización democrática en la escucha de la diversidad social y su dignidad. Donde todavía el drama, es la inexistencia de un liderazgo afín y esperanzador.
Que poco compromiso el tuyo y el de otros que escriben sobre la situación de Chile.
Ni muy adelante que te quemes, ni muy atrás que te de frío.
Los chilenos sencillos, la gente de a pie, la que carga las penurias del sistema imperante, aquellos que diariamente estan marchando, así como millones lo han hecho en el pasado no necesitan mas lastre acádemico, ustedes como intelectuales del pensamiento debieran contribuir con temas sencillos que den espiritualidad y fortaleza en estos momentos dificiles, en estos momentos donde se necesita apoyo para crear un pais mejor,donde se necesita una base histórica, académica y documentada que ayuden a integrar el movimiento social, el movimiento de los mas necesitados, por la historia y el recuerdo de los que dieron hasta su vida luchando por lo que creian era una causa justa.
Es penoso verlos en la otra orilla de la vereda contemplando mareados y anonadados, elucubrando sobre cosas tan sencillas. el bosque no los deja ver el bosque parece.
Tu último párrafo me demuestra que ya ves la luz al final del tunel, ponle ganas y ponte del lado que consideres correcto en forma consistente, así como los que diariamente lo hacen en las calles.
“Beethoven es amigo y contemporáneo de la Revolución Francesa, y continuó fiel a ella incluso cuando, durante la dictadura Jacobina, los humanitarios de nervios débiles del tipo de Schiller le dieron la espalda prefiriendo destruir tiranos en el escenario teatral con la ayuda de espadas de cartón. Beethoven, ese genio plebeyo, quien orgulloso despreció a emperadores, príncipes y magnates –éste es el Beethoven que nosotros amamos: por su optimismo inquebrantable, su tristeza viril, por la inspirada pasión de su lucha y por su voluntad de hierro que le permitió agarrar al destino por la garganta–.”
Ígor Stravinski
https://www.youtube.com/watch?v=e7MjcUw0Co0