
Ñuble región y la hegemonía de Concepción
La aprobación por parte del Congreso de Ñuble región, ha acrecentado las críticas y oposición de algunos sectores de la sociedad. Decimos que acrecienta ya que desde que se planteó esta idea, han sido diversos los actores que se han opuesto a su creación. Allí se pueden citar algunos medios de comunicación, políticos, sectores empresariales y algunos (autodenominados) “regionalistas” o críticos de Santiago.
Las razones o motivos para oponerse a la nueva región son variopinto, desde aspectos económicos, pasando por los territoriales, hasta los políticos. Sin embargo, cabe señalar algunas cuestiones que llaman la atención en determinados opositores. Por ejemplo, resulta paradójico escuchar algunos discursos (academicistas y otros más bien panfletarios) que históricamente han criticado el centralismo y el poder que tiene y ejerce Santiago, pero guardan un silencio sobre la hegemonía que tiene la ciudad de Concepción a nivel regional. Parece ser que el único centralismo malo o nocivo es el santiaguino, no así el penquista. Extraño regionalismo aquel, que critica a la capital del país, pero tiene una condescendencia con la capital regional. Por ejemplo que dicen los regionalistas (locales) ante el esfuerzo que deben hacer algunos habitantes de la Provincia de Arauco por trasladarse a tempranas horas de la mañana para recibir una atención médica en el hospital Guillermo Grant Benavente. ¿Dónde están los regionalistas del Biobío para levantar su voz ante esta situación?
Segundo, se alude que la creación de Ñuble región repercutirá en la pérdida de poder y protagonismo del Biobío a nivel nacional. ¿Es el Biobío el que eventualmente se ve afectada o es la ciudad de Concepción? Al parecer es esta última, pero aquellos discursos genéricos, tienden a hablar en representación de todos. Pero de ser cierto aquello ¿es culpa de Ñuble región que Concepción pierda protagonismo o fuerza?, responsabilizar de aquello a la nueva región es un simplismo o reduccionismo. Si el Biobío o mejor dio la ciudad de Concepción han perdido poder e injerencia a nivel nacional, no es responsabilidad de Ñuble. El Biobío y la capital regional, hace rato dejaron de ser actores, para convertiré en espectadores, de la realidad nacional.
Tercero y ante la inquietud o preocupación de sectores empresariales y algunas corporaciones de estudios, cabe plantearse ¿qué han hecho estos sectores por apoyar y potenciar a los habitantes de Ñuble, qué política o estrategia han impulsado para fomentar el desarrollo en aquella zona? No hablamos de determinadas iniciativas, nos referimos a proyectos de mediano o largo plazo.
Parece ser que lo que realmente está detrás de la inquietud, preocupación y oposición de estos sectores y los “sui generis” regionalistas, no es la preocupación por la atomización del Biobío, sino más bien como Ñuble región afecta los intereses y el poder que concentra la ciudad de Concepción. De ahí que la creación de Ñuble región trastoque la hegemonía que históricamente ha ejercido Concepción sobre el resto de las provincias, comunas y sus habitantes.
En consecuencia y más allá de las dudas que puede generar esta nueva región, constituye un desafío no sólo para sus habitantes y autoridades, sino también para el mundo de la academia (sedes de la UBB y UdeC), la sociedad civil y los grupos empresariales de la zona. Por lo tanto todo el éxito para ellos.
Todavia no encuentro una razón de peso para haber declarado a ñuble una region mas. La cantidad de recursos en burocracia no se si sea un verdadero beneficio.