LA MODA NO INCOMODA
En las típicas revistas femeninas de moda, las que, en ocasiones, son cortesía en hoteles de muchas estrellas, encontramos léxico foráneo o préstamos lingüísticos – como lo denominan los especialistas – que da para mucho paño que cortar.
Teniendo en cuenta solamente los estilos que se conocen en el vestir, podemos acotar algunos encontrados aquí y allá: estos estilos van desde el hippie chic- rockero- étnico- animalista- casual look – trendy look o“a la última moda”-shabby look o “desaliñado”- retro – vintage (“de otra época”)- cool look – romantic look – nude look (“semi desnudo”), Boho-Indie (“bohemio-indio”)- “girlie” look (de “girl” para niña; estilo infantil, tipo lolita)- sophisticated look, opuesto a “natural look” . Son tantas y tantas las expresiones para referirse a uno u otro estilo que se privilegia a diario- por cierto en damas y varones, no vaya a ser cosa que nos tilden de homofóbicos si no se aclara el punto – que nos perderíamos en esta jungla de palabras.
Rescatamos algunos términos de frecuente uso que se aplican a lo que debe ponerse una persona que quiere estar a la moda, por más que le apriete alguna parte del cuerpo, “no le incomoda” y entonces se la/lo tilda de “fashionista”, ítem léxico que se origina de la palabra inglesa “fashion” para ”moda”.
Comenzamos por los zapatos: los “stilettos” del italiano “stiletto” para “estilete”; son zapatos de tacones muy altos, aguzados, a los que antes simplemente llamábamos “zapatos de taco o tacón alto, o de taco aguja”; también están de moda las plataformas, tal cual se usaron en los locos años 20, y volvieron a ponerse en boga con la moda hippie en los 70. Los “feos” o bototos tipo militar son extremadamente populares entre los adolescentes y son un “must-have” (expresión inglesa para decir que es “algo que tienes que tener”) del clóset de los jóvenes. Estos últimos se llevan con medias gruesas, tipo balerinas (del italiano “ballerina”) o patas. No todo calzado es de taco alto; también tenemos los “flats” de luxe (inglés para “planos”) y las “ankle boots” del inglés para “botas cortas” o “botas al tobillo”, pero además están muy de última las “open boots” o “botas abiertas” que dejan asomar los dedos de los pies y los zapatos llamados “peep toe” o “dedo asomado”.
Cuando se sale de “noche de chicas”, expresión con traducción directa del inglés para “girls’ night”, todo lo brillante es deseable. El “animal print” o “diseño animal” aún no pasa de moda con sus motivos animalescos que imitan piel de zebra, leopardo, serpiente, etc. En telas doradas, plateadas o cobrizadas y también opacas y metalizadas para destacar la figura, complementándose con accesorios como carteras, billeteras, monederos, llaveros, pañuelos para el cuello y cabeza que llevan los mismos motivos de diseño.
El “blazer” (del inglés para “chaqueta abotonada”), las capas y los “cardigans” , término inglés para “chaleco abotonado o abierto”, son los predilectos para una salida formal. Un casual look no está completo sin los famosos “tenis” (en inglés para “zapatillas deportivas”) que pueden completarse con jeans desgastados, clásicos, rajados, decolorados, con tachas o aplicaciones ornamentales de todo tipo.
Habíamos olvidado mencionar el “look navajo” entre los diversos estilos de vestimenta; éste emplea elementos decorativos propios de los indios estadounidenses que se conocen como navajos, se trata de una tendencia muy “in” que usa el estilo étnico de estos indios, incluyendo elementos como flechas , plumas, abalorios para resaltar algunos rasgos de la ropa que se lleva.
En verano se utiliza mucho el tipo de sandalia que se conoce como “gladiadora”: con correas y amarras hasta media pierna.
Ha vuelto a la palestra del vestir el “shirt dress” o “vestido camisero” tan conocido por nosotros en otros años. Las camisetas safari constituyen otra prenda de ropa “trendy” por estos días y son un “must” en la vestimenta juvenil, las que naturalmente ostentan “animal print” en el diseño de las telas. Ya casi no podemos dejar de usar los préstamos ingleses y si lo hacemos, hemos perdido la noción de que se trata de otro idioma.
Estamos verdaderamente ante tal cantidad de términos “prestados” para saber lo que se usa y lo que no. Una cosa está más que clara: se usa de todo, pero no a todos les quedan algunas prendas de moda, ni tampoco deben usarse a cierta edad, aunque muchos y muchas – como se dice ahora sin razón, porque decir “el gato es un felino” incluye a la “gata” y a las “gatitas y gatitos nuevos” – hacen caso omiso y jamás miran la cédula de identidad. Lo más probable es que al paso de las estaciones – que ahora se están traslapando con el cambio climático – los cánones de la moda cambien y muchos de los términos acotados sean sustituidos por otros en el tiempo y en el uso. Pero nuestra intención es válida, al afirmar que“la moda no incomoda”.
Entretenido, dinámico ilustrativo…
fantástico su crónica Ana María.