
Partido Socialista: 85 años de historias
Un 19 de abril de 1933 un grupo de personas se congregaba para dar vida al Partido Socialista de Chile. Entre sus fundadores se destacan, entre otros, a Eugenio Matte, Oscar Schnake y Eugenio González. Entre las fuentes ideológicas que nutrieron al socialismo a contar de los años treinta se pueden mencionar el anarquismo, socialismo libertario, humanismo, el nacionalismo progresista y una propuesta latinoamericanista.
Este nuevo partido de izquierda abrazó el marxismo como doctrina y método de interpretación de la realidad; asimismo, como señala Julio Cesar Jobet, el Partido Socialista congregó a trabajadores manuales e intelectuales, clases medias y pequeña burguesía. A lo anterior se puede sumar la presencia de un segmento militar y masónico en su fundación.
De la conformación de ese variopinto grupo, se puede explicar uno de los rasgos que marcará la historia del partido en estos 85 años de vida: la aparición de corrientes/tendencias internas, las tensiones y la presencia de caudillos o liderazgos.
Desde su fundación, el socialismo ha transitado por varias etapas y momentos no menos convulsos Desde las divisiones de los años cuarenta hasta su reunificación en 1957. Entre medio, la irrupción de Salvador Allende como líder indiscutido y sus intentos por llegar a la presidencia de la República, a lo cual se puede sumar los debates internos sobre el sistema de alianzas o bien las controversias sobre la vía revolucionaria (lucha armada) o institucional para la construcción del socialismo. Si bien los congresos del 65 y 67 se inclinaron por lo primero, el partido nunca dejo de participar de las elecciones, en el parlamento y en el debate público.
Sin duda los años setenta fueron un momento paradójico para el partido. El triunfo de Allende significó la culminación de un proceso en la construcción estratégica de la vía chilena al socialismo; pero los controversiales años de la Unidad Popular, convertirían al Partidos Socialista en uno de los principales protagonistas del periodo.
El golpe de Estado de 1973 conllevó toda una travesía para los socialistas. A la represión de la dictadura, se sumó el análisis y autocrítica sobre el fracaso y derrota. Fines de los setenta y la década de los ochenta se caracterizarían por un proceso de renovación; es decir un cambio político, cultural y epistemológico. Atrás quedaban los ideales políticos revolucionarios de los años 60 y 70 para dar paso a la idea de buscar lo posible, aquello que Lechner denominó “Realismo político”.
Desde hace unos años el partido, así como otras colectividades, vive un proceso de cuestionamiento ciudadano. Lamentablemente tenemos que decir que ese gran partido que animaba los debates públicos, las discusiones sobre el tipo de Estado y sociedad, así como formador de jóvenes y espacio de encuentro intelectual, se ha ido apagando peligrosa y lentamente. No dejemos que eso ocurra.
Muy, pero muy de acuerdo con el comentario de Pedro.
Los Socialistas hoy, y en su historia han estado mas cerca de la deslealtad que de la fidelidad, si no, pregúntenle a la Presidenta Bachelet.
No puedo si no respetar al profesor Monsálvez.
Sin embargo, en esta ocasión me permito discrepar muy profundamente del fondo de su artículo…
Si bien,su artículo está muy bien estructurado y argumentado en base a argumentos ligados a datos»teóricamente» fundados, en la realidad el P.S. nunca fue mas que un partido lleno de fracciones en torno al poder de grupos, lejos estuvo de ser un partido serio, disciplinado y mucho menos un partido obrero, proletario.
Fue el peor enemigo del presidente mártir y en los tiempos de la dictadura sólo aportó confusión y malas prácticas.
Después de la dictadura, nunca fue capaz para dar dirección al proceso y hoy, entre sus filas muchos, demasiados corruptos, lo que habla de su inconsecuencia.
Interesante el articulo sin duda. Quisiera sin embargo destacar dos o tres rasgos que caracterizaron el PS desde su fundación. Uno es el rechazo de los vaticanos ideológicos y esto es muy importante por cuanto el Partido se funda en una época en que los sectores progresistas miraban con atención lo que ocurría con la Revolución de Octubre y los bolcheviques. Nadie puede desconocer que la gran Revolución irradió hacia América Latina y nacieron los partidos comunistas. Bien, pero el PS fué muy ajeno a eso y aquella actitud le costó incluso vidas. Otro rasgo muy digno de destacar es su internacionalismo y latinoamericanismo que lo llevaron a apoyar de manera decidida a los movimientos de liberación anticoloniales de africa y medio oriente. De alli su cercanía y fraternal relación por ejemplo con el FLN argelino o la ANC en la Sudáfrica del Apartheid o la OLP en el caso del pueblo palestino. He leido un ataque duro al PS por parte de un lector. le aclaro, el PS jamás estuvo contra Allende, el que no compartiese aspectos de su política no significa que estuvo en su contra. Baste recordar que TODOS quienes lucharon y murieron en la Moneda en la lucha final del Presidente contra los golpistas, TODOS, eran socialistas. Es más , en Indumet y La Legua-poblacion del sur de Santiago-, quienes se enfrentaron armados contra TODAS las fuerzas golpiestas desde la 1400 hs del 11 y hasta el día siguiente, fueron socialistas. Todos encabezados por 3 miembros del Comité Central y a la cabeza de ese combate estuvo Arnoldo Camú , asesinado más tarde por la dictadura, quien era miembro del CC y de su Comisión Política. La derecha, y algunos despistados socialistas, se han encargado de propalar el infundio de que el PS estuvo contra Allende. Esos es falso.