«No podemos resolver la crisis climática sin cambiar nuestra relación con la naturaleza y con nosotros mismos.»

Naomi Klein.

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Coronel y San Pedro de la Paz: comunas de sacrificio

Carlos Bonifetti Dietert

Ingeniero C. Mecánico UdeC. Ambientalista.
Las comunas de Coronel y San Pedro de la Paz, desde hace décadas, están siendo tomadas como territorios de sacrificio. No conforme con los daños provocados a las comunidades urbanas con los agresivos proyectos portuarios, plantas pesqueras, centrales termoeléctricas a carbón, viales y de urbanizaciones sin coto ni control, ahora se pretende losarlas con una gran y larga lápida de hormigón armado: una conexión vial que han denominado Ruta Piedemonte, la que, como su nombre lo indica, correría por el piedemonte de la Cordillera de Nahuelbuta -en un trazado limítrofe entre los montes y el ancho llano arenoso que llega hasta la costa- hilvanando una serie hidráulica de humedales y lagunas que comienza en las inmediaciones del Humedal Los Batros y recorre ca. 23 km para terminar en el Humedal Boca Maule (Coronel) y su descarga al Océano Pacífico.

Antecedentes

A pesar de que tenemos una Ley de Humedales Urbanos (Ley N°20.202) [1] desde la fecha de su publicación, el 23.01.2020 -lograda por la pujanza de los voluntarios de la Red Plurinacional de Humedales de Chile y la gestión en su formulación del senador Alfonso de Urresti-, los avances para protegerlos han sido muy lentos y complejos por la engorrosa cadena de trámites burocráticos involucrados, como se observa en le diagrama de flujo de los trámites requeridos, mostrado al pie de este artículo.

Así, se genera una suerte de “ping-pong” entre los municipios -en general muy tímidos para solicitar las designaciones de “declaración de humedal urbano (HU)” y el ministerio de medio ambiente (MMA)-, bastante tímido también para decidir (aunque la ley lo faculta para hacerlo “por oficio”) cuando los municipios no actúan con prontitud.

Mientras tanto, en la angustiante espera, los humedales urbanos continúan siendo rellenados con escombros y tierra por sus propietarios para elevar su plusvalía y usarlos para urbanizarlos y construir, sin escrúpulo alguno, casas y edificios sobre ellos. Los que pagarán los platos rotos, después, serán los incautos compradores de los inmuebles -hipnotizados por las engañadoras campañas de marketing y propaganda de las inmobiliarias- cuando se les inunden sus propiedades por crecidas o se produzcan daños estructurales irreparables por estar construidos sobre suelos no aptos. Así estamos observando que está resultando obvio y urgente, revisar a fondo la Ley de Humedales Urbanos y modificarla para que realmente opere.

Entrando en materia, luego de lo dicho en la viñeta a modo de preámbulo, analizaré brevemente la situación de la Ruta Piedemonte, después de tantos artículos que se han publicado en este semanario, tanto por la pluma de mi amigo el arquitecto Antonio Zelada E. [2][3] como por la mía, sobre este verdadero desaguisado.

Cómo ya lo hemos explicado, ahora que se acerca la hora de la verdad (toda verdad tiene su hora) es menester hacer un racconto, un repaso de la génesis de este calvario. 

El trazado de la controvertida ‘ruta por el piedemonte’, íntimamente ligada al ‘puente industrial’, -que seguiremos argumentando hasta el final para que se elimine de plano y definitivamente-, no ha obedecido a ningún análisis científico, económico o ingenieril, sino solo a un capricho lanzado al tapete por los llamados “intereses creados”, intereses de aquellos que no tienen ningún escrúpulo para satisfacer sus ansias egoístas de crecimiento y ganancias sin coto, por plusvalía, a costa de destruir ecosistemas vitales, sin importarles los daños que sus acciones ocasionen a los territorios y a las comunidades sin poderes ni ‘santos en la corte’ que viven en ellos.

La verdad sin tapujos.

El fin u objetivo principal de hacer una ruta vial para todo tipo de vehículos por el peor trazado que la ingeniería y el sentido común puedan imaginar, no es otro que aumentar la plusvalía de los terrenos del llano arenoso entre la línea de piedemonte y la ruta 160, y de los terrenos de lomajes y quebradas del cordón cordillerano Nahuelbuta ubicados entre el límite sur de las urbanizaciones del barrio Andalué [4] y la ciudad de Coronel. Por lo demás, esos terrenos transformados con el correr de los años en “forestales”, están demarcados en el actual plan regulador metropolitano como ¡zonas de extensión urbana!, … y casi hasta el fondo de las quebradas.

Lo de vía indispensable para camiones de gran tonelaje de transporte de productos forestales, celulosa u otros, entre la provincia de Arauco y los puertos de Talcahuano, San Vicente y Lirquén, además de rollizos de madera como materia prima hacia Arauco, es harina de otro costal, puesto que ese tránsito se puede hacer tanto por una ruta costera como por una por el piedemonte, aunque como ya hemos dicho (entre otros, también la Red de Humedales del Bio Bío), esta última sea inadecuada. Es por esto que trazaron, con un dedo, la unión de la cabecera sur del puente industrial con la ruta 160 por arriba y dentro del Humedal Los Batros nominado, ¡oh paradoja!, como santuario de la naturaleza, para así continuar por el humedal -con proyecto partido en dos y separado del puente, con el viejo y sucio truco de dividir para reinar- hasta tocar… ¡el ansiado piedemonte! “Linda la vieron” como vulgarmente suele decirse.

¿Y por qué dije que al comienzo que todo esto se está haciendo sin análisis ingenieril? Pues porque un proyecto de ingeniería que se precie y pueda ser denominado en propiedad como tal, debe, obligatoriamente dentro de la disciplina de la ingeniería de Planificación y Evaluación de Proyectos, considerarse por lo menos dos opciones de alternativa y, además, mostrar las cartas, vale decir en este caso, la evaluación y sus resultados a la ciudadanía. Y aquí hemos visto que, a dedo y a priori, se puso en el tapete solo una, ya sabemos cuál y porqué.

¿En qué otra instancia se hizo una evaluación con varias opciones, como debe ser?, pues, aunque ustedes, estimados lectores y vecinos no lo crean, la hubo. Fue en un estudio preliminar hecho por tesistas holandeses que trabajaron junto a colegas de la UCSC, de Talcahuano. El estudio se hizo aplicando las técnicas del análisis de sistemas, para evaluar dos opciones principales: una por el piedemonte y la otra por la costa, con varias sub alternativas o variantes.

El estudio se titula: “Enfoque multicriterio para los problemas infraestructurales de San Pedro de la Paz – desde una perspectiva urbanística e hidráulica” (“Multi-criteria approach to the infrastructural problems of San Pedro de la Paz – from an urbanistic and hydraulic perspective”, por el título del original en inglés). Es un estudio de gran calidad y hecho con seriedad y eficiencia en menos de 90 días, e indica en sus conclusiones -aunque preliminares- que una ruta por el piedemonte no es la más adecuada.

El informe  -correspondiente al proyecto multidisciplinario, Proyecto Chile 2015- formó parte de una maestría de la Facultad de Ingeniería Civil de la Universidad Tecnológica de Delft (TUDelft), de Holanda, hecho en conjunto con la Universidad Católica de la Santísima Concepción (UCSC) y dirigido por destacados doctores de ambas universidades señaló en sus conclusiones que la Ruta Costa resulta mejor opción -aunque preliminar, hay que destacarlo- frente a una por el piedemonte; además, señaló que el estudio se debe profundizar en una segunda etapa para una evaluación final.

Dicho informe fue entregado personalmente, en Concepción el año 2017, al ministro de Obras Públicas Alberto Undurraga; luego, el informe desapareció del mapa. Ya imaginarán ustedes porqué.

Colofón

Esperemos que este enésimo intento de informar lo que se mantiene oculto tras bambalinas -lo que se conoce como mostrar “la verdad sobre la milanesa”- de sus frutos: que no se construya esa vía como pretende el MOP y se vuelva analizar la opción Ruta Costa, que está planteada desde los años ‘60. Salvemos los humedales y lagunas -Los Batros, Junquillar, La Posada y los demás de la serie hasta llegar a Boca Maule- antes que pase más tiempo o tengamos que lamentar un descomunal desastre.

Fuente: Ley de Humedales Urbanos


Fuente de imagen:

https://www.google.com/maps/place/Humedal+Boca+Maule/@-36.9978101,-73.1922312,15z/data=!4m6!3m5!1s0x9669c69fd4d32919:0xf10b3999e40d05fb!8m2!3d-36.997778!4d-73.181944!16s%2Fg%2F120wrl5n?authuser=0&entry=ttu

Crédito: Patricio Carvajal

Referencias:

[1] https://humedaleschile.mma.gob.cl/humedales-urbanos/

[2] https://laventanaciudadana.cl/la-solucion-costanera-costera/

[3]https://laventanaciudadana.cl/reglas-del-juego-etica-y-estetica-y-el-bien-comun-o-la-libertad-de-mercado-contra-el-bien-comun/

[4] https://es.wikipedia.org/wiki/Andalu%C3%A9

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5 Comentarios en Coronel y San Pedro de la Paz: comunas de sacrificio

  1. Gracias por vuestros comentarios Julio y Eduardo. Aprovecho la oportunidad para agregar algo que se me quedó en el tintero.
    El Puente Industrial se vendió como una solución de la habitual congestión vehicular.
    Nada más falso pues las congestiones dependen de la cantidad de vehículos que circulan y que siempre aumentan, por la manía del crecimiento de todo. Es de perogrullo: no hay otra solución a ese problema que la disminución de la cantidad de vehículos.

  2. Notable nota !!! Es lo que toda la comunidad de coronel, San Pedro de la paz y la región deberían conocer

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